La ministra de agricultura, Loyola de Palacio intervino para clausurar las jornadas parlamentarias organizadas por la Cámara extremeña, solicitando unidad española en las negociaciones de Bruselas, de cara a la reunión del Consejo de Ministrios de agricultura de la Unión Europea, que se efectuará el día 22. De Palacio explicó que se propone, en primer lugar, corregir las "discriminaciones" que, desde su integración en 1986, sufre la agricultura española y, en segundo lugar, negociar en relación a los futuros reglamentos de dos de los sectores más importantes para la agricultura española como son el vino y el tabaco. Los propósitos de España referente al vino, dijo, es aumentar desde el 1% propuesto inicialmente hasta el 3,5% y en tabaco, consolidar los ya existentes. La ministra se reservó una amplia parte final de su intervención para reclamar la unidad de todos: Gobierno central, Comunidades Autónomas y agricultores puesto que "España tiene fuerza para sacar adelante sus derechos a condición de no pretender, con vistas a una clientela electoralista, auténticas fantasías hechas a conciencia de que jamás podrán ser estimadas en los círculos europeos (...) en Bruselas, los disparates no tienen circulación y cuestan caro" dijo. A la sesión acudieron y expusieron su opinión los representantes de asociaciones agrarias, cooperativas e industrias del sector y la ministra departió especialmente, e incluso bromeó, con el Consejero Eugenio Álvarez. Al final de las jornadas, según la opinión del presidente de la comisión de agricultura de la Asamblea, Juan Luis Aparicio, los agricultores extremeños se muestran menos pesimistas respecto a los futuros acuerdos de la Agenda 2000.
