Querida Loyola:
Hoy hace seis meses que te convertiste en “Inolvidable” (como dice Joaquín) y que nos sentimos todos un poco más solos. Parece que fue hace mucho y a la vez hace muy poco.
La vida de tus amigos desde entonces es un poco más triste porque nos faltas tu. Tu hermana Ana te describió como un roble y realmente lo eras y sigues siendo para todos.
El trece de diciembre de 2006 se paró la vida de los que te queremos –y lo digo en presente porque sólo se muere del todo cuando nos quedamos en el pasado-. Viviste con valor, con un valor infinito... y nos dejaste un testimonio de vida que no tiene igual.
Durante este medio año te han recordado constantemente, tus compañeros del partido pero sobre todo tus amigos y tu familia. Sigues siendo parte de nuestra vida y queremos seguir siendo parte de la tuya incluso en el más allá porque estamos seguros de que nos cuidas desde el Cielo.
Todo lo que hacemos va por ti, ¡valiente! -"no se gana la batalla que no se da"
Un beso muy fuerte de todos
PD.- es imposible expresar con simples palabras lo que significas para los que te queremos e intentarlo por mi parte sería de una necedad imperdonable-