La valiente
Loyola de Palacio, que ya es una vasca universal,
no era una mujer producto de una cuota obligatoria y eso se notaba, a nadie le cabía duda de que cuando estuvo en el Congreso, el parlamento de Estrasburgo o fue ministra y comisaria europea era por méritos propios y no por imposición legal.
del blog de Miguel Barrachina